Y tras la ducha te esperé paciente
en las escaleras, tierra de nadie, entre el dormitorio y el salón. Cesa el
ruido del agua, te oigo a lo lejos, la incertidumbre me corroe y la excitación
me invade. ¿Bajaremos al salón o subiremos al dormitorio?, no importa, solo
amémonos.
Siiiii
ResponderEliminarHagámoslo.
Eliminar¿Y si no es necesario elegir?
ResponderEliminarEn ese caso las escaleras serán testigo mudas del encuentro en tierra de nadie.
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