Y con mi fantasía en la ducha disfruté.
Agua que recorre mi cuerpo acariciando todos mis rincones, como si
de tus manos se tratara.
Humedad caliente, sexo erguido, placer latente.
Nada es lo que parece, pues hasta el más romántico de los hombres tiene su lado oscuro.
Y con mi fantasía en la ducha disfruté.
Agua que recorre mi cuerpo acariciando todos mis rincones, como si
de tus manos se tratara.
Humedad caliente, sexo erguido, placer latente.
La ténue luz del alba se colaba entre las cortinas reflejando bellas sombras sobre nuestros cuerpos desnudos. Todavía dormías, como un áng...
Una descripción que sin duda hace volar la imaginación...
ResponderEliminarLa imaginación es poderosa, como el agua de la ducha.
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