La belleza de tu cuerpo,
las arrugas de las sábanas,
el avanzar de tus ganas
y el veneno de tu piel,
por más que lo niegues ven,
mi calor te quiere bien,
dame tu placer ¿Mañana?
Tu goce lo quiero al alba,
dame tu carne y tu verbo
antes de que salga el sol.
Una insinuante y romántica invitación...
ResponderEliminarTodo un ruego por el íntimo encuentro.
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